PEQUEÑO BIZCOCHO DE ZANAHORIA AL MICROONDAS
Soy una fanática del bizcocho de zanahorias, pero a mi marido los bizcochos húmedos, no le hacen gracia y ahora en verano, si los chicos no vienen, prepararme un bizcocho grande para mi sola, me da mucha pereza.
Así que con esa moda de los bizcochos en taza de microondas, me dije, voy a practicar y miro como sale uno pequeño para mi sola.
Bueno deciros, que para quitarme el antojo, puede servir, no es tan jugoso como el del horno, ni tiene tanto sabor, pero estoy satisfecha con el resultado, tuve para dos desayunos y una merienda y eso que preparé la mínima cantidad, pero no en una taza, he utilizado un pyrex de cristal, os digo las cantidades que puse, lo hice a ojo y acerté, pues hace unos días hice uno sin zanahoria y solo he tenido que restar algunas cantidades ahora.
1 Huevo Tamaño L.
2 C/S de Azúcar Moreno.
2 C/S de Aceite de Oliva de 0'4º.
3 C/S de Leche Desnatada.
3 C/S de Harina Integral.
Pizca de Levadura de Repostería.
Pizca de Bicarbonato. "esto es opcional"
Pizca de Jengibre. "esto es opcional"
Pizca de Nuez Moscada. "esto es opcional"
1 Zanahoria.
Preparar todos los ingredientes y pelar, lavar y rallar la zanahoria.
Elegir el envase donde vais a cocer el mini bizcocho.
Yo no lo hago en taza, porque se sale, pues sube muy rápidamente.
Poner por el mismo orden que os he puesto arriba los ingredientes, primero batir el huevo y luego añadir todo lo demás por el mismo orden, siendo lo último la zanahoria, mezclar bien y meterlo al micro, ya sabéis primero 2 minutos y luego ir sumando de 30 en 30 segundos el mío tardó 5 minutos en cocerse, hasta que se desprende la masa de la pared del envase.
No os preocupéis podéis abrir la puerta y comprobar.
Mi bizcocho lo tuve que parar cuando llevaba minuto y medio y esperar unos segundos y luego ir poniendo poco a poco más tiempo, la masa sube hasta el borde y luego baja.
El truco la cara pegada a la puerta de cristal.
Parar, arrancar, parar, como máximo en 5 minutos está listo.
Luego si queréis volcarlo, con un cuchillo pasar por los bordes, dejarlo un rato boca abajo y cae.
Y buen provecho.
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